Producto obtenido en la destilación fraccionada del petróleo crudo (depende del crudo que se destile es una fracción única o en una mezcla de varias fracciones). Se compone de una mezcla de hidrocarburos de peso molecular poco elevado. Debe ser volátil, de modo que queme fácilmente y mejore el arranque en frío, pero no mucho para que no cree demasiados vapores con tiempo caluroso. Una de sus propiedades, el índice de octano (que incide crucialmente en su capacidad antidetonante), se mide en comparación con la mezcla de dos hidrocarburos como lo son el isoctano y el n-heptano, de muy buena y muy mala capacidad antidetonante; al primero se le da grado 100, y al segundo grado 0. Así, una gasolina con una graduación de 98 octanos, se comportaría como una mezcla con 98 partes de isoctano y 2 de n-heptano.
Desde 1930 a la gasolina se le adicionaba un compuesto antidetonante llamado tetraetilo de plomo (un 0,06% de tal compuesto en la gasolina incrementa su octanaje entre 5 y 10 puntos), que también cumplía una función lubricante en los asientos de las válvulas. En la actualidad, en la gasolina sin plomo no se usa este aditivo, ya que los humos de escape con restos de compuestos de plomo resultan nocivos y entorpecen el correcto funcionamiento del catalizador; a fin de emplear dicha gasolina sin plomo, los motores poseen los asientos de las válvulas reforzados.